domingo, 30 de mayo de 2010

Sólo cuando

En el hospital ,de visita, se oye perfectamente lo que se vive en la cama de al lado

"Por favor, sea breve"- dice el anciano. Y añade- “ lo que necesito es la visita de mi hijo, no la de un voluntario que no sabe qué hacer en sus horas libres”

El joven se acerca, agarra entre sus manos la izquierda del viejo y la aprieta en un gesto que quiere ser tranquilizador. A falta de palabras y sin posibilidad de darle un abrazo, esa es su forma de decirle que el vínculo aun existe.

Dicen, que esa noche, al llegar a casa, sólo se permitió hundirse y llorar, cuando ella le preguntó como le había ido con su padre.

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